El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado recientemente con imponer un arancel del 25% a la UE, lo que ha aumentado significativamente las tensiones comerciales mundiales.
Aunque estos posibles aranceles afectarían a toda la UE, existen preocupaciones adicionales sobre el efecto sobre Irlanda y las exportaciones irlandesas.
La industria farmacéutica irlandesa probablemente será una de las más afectadas en el caso de los aranceles estadounidenses.
En 2024, Irlanda exportó bienes por valor de 72.600 millones de euros a EE. UU., lo que supuso un aumento de 18.600 millones de euros respecto al año anterior, según la Oficina Central de Estadística del país (CSO).
Supriya Kapoor, profesora asociada de Finanzas en el Trinity College de Dublín, explicó a Euronews: “En comparación con los demás países de la UE, Irlanda está más expuesta a los aranceles porque exporta proporcionalmente más a Estados Unidos. Los productos farmacéuticos y los dispositivos médicos son los que más se benefician de estas exportaciones”.
“Y gran parte de esta producción farmacéutica se realiza en Irlanda para empresas estadounidenses como Pfizer, Eli Lilly, Johnson and Johnson, por nombrar algunas”.
Por lo tanto, los aranceles estadounidenses sobre la UE podrían tener un impacto significativo en la economía y el producto interno bruto (PIB) irlandeses al encarecer las exportaciones a Estados Unidos, lo que a su vez podría contribuir a una menor demanda.
Interrupciones en la cadena de suministro
Los aranceles de represalia de la UE podrían agravar los problemas de la cadena de suministro para las empresas farmacéuticas.
La Asociación de Exportadores Irlandeses ha emitido una advertencia a las empresas para que comiencen a prepararse para una posible guerra comercial.
“La gente tiene que tomar esto en serio. Cualquier idea de que Donald Trump no va a seguir adelante con los aranceles es un error.
La gente tiene que empezar a analizar las cadenas de suministro y ver dónde están expuestas”, dijo a RTÉ Simon McKeever, director ejecutivo de la Asociación de Exportadores Irlandeses.
En general, se supone que los productos farmacéuticos están exentos de aranceles, según un acuerdo de la Organización Mundial del Comercio (OMC) de 1994, ideado para garantizar un mejor acceso a los medicamentos a nivel mundial.
Sin embargo, Trump ya tiene antecedentes de retirarse de otros acuerdos globales clave, como el Acuerdo de París de 2015 sobre el cambio climático.
Los aranceles del 25% que impuso Trump a todos los productos importados de México y Canadá ya entraron en vigor el martes, junto con aranceles más altos a las importaciones chinas.
Los recursos energéticos de Canadá tendrán un arancel más bajo, del 10%.
Los aranceles específicos podrían tener un mayor impacto en Irlanda
Los aranceles estadounidenses específicos sobre ciertos bienes de la UE, como automóviles o productos farmacéuticos, podrían afectar potencialmente a la economía de la UE y de Irlanda más que los aranceles generales, según Oxford Economics.
La empresa afirmó: “Nuestros modelos a nivel de industria sugieren que las industrias farmacéutica y de alta tecnología serían las más afectadas. Del mismo modo, las economías más pequeñas y menos diversificadas están más expuestas. Estimamos que Irlanda y las economías de Europa central y oriental (CEE) sufrirán el mayor impacto”.
“Optar por aranceles específicos en lugar de aranceles generales podría exacerbar el impacto en algunas industrias de la UE. Simulamos un escenario con aranceles del 25% solo para metales, automóviles y productos farmacéuticos. Encontramos resultados similares a nuestro escenario de aranceles generales, pero con efectos más fuertes para Irlanda y Dinamarca debido al sector farmacéutico, y para Alemania y Eslovaquia debido al sector automotriz”.
Pagar por la propiedad intelectual
Muchas empresas farmacéuticas estadounidenses establecen instalaciones de fabricación en Irlanda debido a su baja tasa de impuesto corporativo, aunque están vinculadas a sus sedes centrales en Estados Unidos.
Las empresas irlandesas luego pagan una regalía a las empresas matrices estadounidenses, lo que les permite utilizar fórmulas para fabricar productos.
Esto explica en parte por qué Irlanda importa de Estados Unidos muchos más servicios de los que exporta, cosa que no ocurre con los bienes.
La amenaza de aranceles del 25% de Trump actualmente se relaciona con bienes, aunque es posible que estos sistemas sean objeto de ataques por parte de la nueva administración