La Fuerza Aérea israelí lanzó ataques contra sitios de Hezbolá en el sur del Líbano, apuntando a instalaciones militares y lanzadores de cohetes cerca de Zebkin y Yater.
A pesar de un alto el fuego vigente, Israel cita amenazas como justificación para extender la presencia de tropas más allá del 18 de febrero.