China dijo que enviará ayuda humanitaria a la región mientras continúa la escalada violenta entre Israel y Hamás.
China está preocupada por las consecuencias del asedio israelí a Gaza y ha anunciado que enviará ayuda humanitaria a quienes la necesitan en la región, según el representante permanente de Beijing ante las Naciones Unidas, Zhang Jun.
Hablando el lunes, después de que el Consejo de Seguridad de la ONU no lograra adoptar una resolución propuesta por Rusia sobre el conflicto palestino-israelí, Zhang dijo que China seguirá pidiendo el fin inmediato de las hostilidades en el Medio Oriente para evitar que se extiendan. y un mayor deterioro de la situación.
El diplomático insistió en que los países deben adoptar una “posición objetiva y justa” para evitar conflictos a gran escala y desastres humanitarios, y deben asegurarse de no causar un golpe aún mayor a la seguridad regional e internacional.
Zhang también planteó específicamente la cuestión del bloqueo de Gaza por parte de Israel, que ha estado en vigor durante más de una semana desde el lunes pasado. Se introdujo después de que militantes de Hamás lanzaran un ataque sorpresa contra el vecino Israel el 7 de octubre. Las autoridades israelíes han dicho que no restablecerán el suministro de combustible, agua o electricidad a Gaza hasta que todos los rehenes capturados por los militantes palestinos sean liberados.
El representante chino dijo que Beijing está “seriamente preocupado por las consecuencias de que Israel imponga un bloqueo completo de Gaza” e instó a Israel a detener el “castigo colectivo de la población de Gaza”.
“Apoyamos la apertura de corredores humanitarios para que el agua, los medicamentos y otros bienes humanitarios puedan llegar a tiempo”, afirmó el diplomático, añadiendo que China “proporcionará asistencia humanitaria de emergencia a Gaza a través de la ONU y a través de canales bilaterales”.
Zhang insistió en que “las cuestiones humanitarias no deben politizarse” y destacó la importancia de respetar el derecho internacional humanitario y hacer esfuerzos para garantizar la seguridad de la población civil.
Mientras tanto, el embajador de Israel en Londres negó las afirmaciones de que se esté desarrollando una crisis humanitaria en Gaza e insistió en que Hamás debe “pagar” por atacar a Israel.
“No hay ninguna crisis humanitaria”, afirmó Tzipi Hotovely en una entrevista con Sky News el lunes, añadiendo que Hamás, que controla Gaza, ha “abusado” de la ayuda humanitaria y en lugar de cuidar de su pueblo ha utilizado los fondos para fabricar cohetes.
“Hamás necesita pagar el precio por… matar a israelíes inocentes y ahora impedir que su propio pueblo evacue”, dijo el diplomático israelí. Señaló que Israel ahora está dando al pueblo de Gaza la oportunidad de ir al sur a “lugares protegidos” , una oportunidad que, según ella, no se les dio a la gente de Kfar Aza y Sderot que murieron en el ataque de Hamas.
La Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas, sin embargo, describió la situación en Gaza como una “catástrofe humanitaria sin precedentes” y señaló que la región literalmente “se está quedando sin vida”.
En total, se cree que unas 1.400 personas han muerto en Israel en el último estallido, según las autoridades locales, mientras que los funcionarios palestinos han informado de más de 2.800 muertes en Gaza.