El año 2025 comenzó de forma sombría, con 42 emergencias sanitarias que afectaron a 305 millones de personas en todo el mundo, según las autoridades sanitarias mundiales.
Las principales crisis sanitarias del mundo surgen de desastres humanitarios, incluidas las guerras, la inestabilidad política y el desplazamiento, el cambio climático y los brotes de enfermedades, señaló la Organización Mundial de la Salud (OMS) en un nuevo informe.
Estos conflictos pueden perturbar servicios médicos como campañas de vacunación, limitar el acceso de las personas a agua potable y condiciones sanitarias, aumentar la desnutrición y la propagación de infecciones, dañar la salud mental de las personas y provocar ataques a las instalaciones sanitarias, sin mencionar el número de muertos por los propios desastres, según la organización.
“La prestación de atención sanitaria es fundamental para construir la paz”, dijo a los periodistas el Dr. Mike Ryan, quien dirige el programa de emergencias sanitarias de la OMS, durante una conferencia de prensa.
La agencia dijo que 17 de las 42 emergencias sanitarias que enfrenta el mundo este año son crisis de “grado tres”, el tipo más grave.
He aquí un análisis más detallado de las crisis más graves que enfrenta el mundo en 2025.
Guerra en Ucrania
El sistema de salud de Ucrania ha sido golpeado desde que Rusia lanzó su incursón a gran escala en 2022.
Se han producido más de 200 ataques a instalaciones sanitarias, que han causado “daños significativos y erosionado la esperanza”, dijo el jefe de la OMS, Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, durante la sesión informativa.
La guerra de Ucrania es la única emergencia sanitaria de alto nivel en Europa, con más de 12,7 millones de personas que necesitan ayuda médica, según estima la OMS.
Conflictos israelíes con Hamás y Hezbolá
Más de 46.600 palestinos han muerto desde octubre de 2023, cuando Israel inició un asalto aéreo y terrestre contra Gaza después de que el grupo militante Hamás matara a unas 1.200 personas en ataques a un festival de música y kibutz en el sur de Israel.
La guerra ha diezmado los hospitales de Gaza y, según la OMS, más de tres millones de personas necesitan ahora asistencia médica en Gaza y Cisjordania.
En el Líbano, alrededor de 1,2 millones de personas fueron desplazadas por las fuerzas israelíes después de que el grupo militante libanés Hezbolá lanzara cohetes y misiles hacia Israel en 2023.
Aunque ambas partes llegaron a un acuerdo de alto el fuego en noviembre, ahora sólo hay cuatro hospitales funcionales en las zonas afectadas por el conflicto, dijo la OMS.
Los trabajadores humanitarios están tratando de garantizar que los servicios esenciales, incluida la atención a los traumatismos, sigan estando disponibles mientras ayudan a reconstruir el sistema de salud para los libaneses que regresan.
La guerra civil de Sudán
Sudán ha enfrentado 141 ataques a instalaciones sanitarias desde que estalló su guerra civil en 2023, y el 39 por ciento de los centros médicos habrían sido destruidos o no funcionaban, según la OMS.
Además, Médicos Sin Fronteras (MSF) anunció este mes que se retirará de un hospital tras un ataque en la sala de urgencias.
Alrededor de 30,4 millones de personas en Sudán necesitan atención médica de emergencia, dijo la OMS.
Además, más de 2,9 millones de personas han huido de Sudán, lo que ha puesto a prueba los sistemas de salud de los países vecinos, mientras que los campos de refugiados se enfrentan a brotes de cólera, malaria, sarampión y hepatitis E.
Repercusiones en Siria y Afganistán
El sistema de salud de Siria estaba debilitado mucho antes del derrocamiento del presidente Bashar al-Assad en diciembre, lo que abrió el camino para que decenas de miles de refugiados regresaran al país.
Más de 16,7 millones de sirios necesitaron ayuda sanitaria el año pasado, según la OMS, y es probable que esa cifra aumente en 2025.
Mientras tanto, se estima que 14,3 millones de personas necesitan ayuda sanitaria en Afganistán, donde dos décadas de guerra y el mayor control de los talibanes desde 2021 han dejado al sistema de salud “fragmentado y gravemente falto de recursos”, dijo la OMS.
Creciente inseguridad en Haití
Según la OMS, el debilitamiento de las instituciones estatales y el aumento de la violencia de las bandas han hecho que aproximadamente el 40 por ciento de los haitianos necesiten atención médica urgente. El país también está luchando contra una epidemia de cólera en curso.
Amenazas superpuestas en África y Asia
En Myanmar, el creciente conflicto entre budistas y musulmanes, sumado al desplazamiento, los desastres naturales, los problemas económicos y el riesgo de brotes de cólera, está poniendo en peligro a millones de personas, afirmó la OMS.
En Yemen, más de 19,5 millones de personas necesitan atención médica como consecuencia de las crisis ambientales y los conflictos. El país se ha visto empujado hacia la hambruna, mientras que enfermedades prevenibles mediante vacunación, como la difteria y la tos ferina, siguen propagándose.
Alrededor de 21,4 millones de personas necesitan ayuda sanitaria en Etiopía, donde desastres como sequías, inundaciones y deslizamientos de tierra, además de brotes de cólera y malaria y la violencia constante, constituyen importantes amenazas para la salud.
Somalia también se enfrenta a brotes de enfermedades y crisis relacionadas con el clima, y tiene una de las tasas de mortalidad materna más altas del mundo. Seis millones de personas necesitan atención médica urgente, según la OMS.
En Sudán del Sur, el sector de la salud se ha visto paralizado por brotes de malaria y sarampión, y ha sido difícil que la ayuda humanitaria llegue debido a problemas burocráticos y de seguridad.
Mientras tanto, la República Democrática del Congo (RDC) enfrenta casos continuos de neumonía, cólera, sarampión, polio y COVID-19, así como problemas de seguridad, inseguridad alimentaria y desastres naturales que llevan a que alrededor de 13 millones de personas necesiten atención médica de emergencia.