El banco Crédit Commercial de France (CCF) anunció el miércoles un plan de reestructuración para los próximos dos años, estimando la pérdida de unos 1.400 empleos.
Los recortes afectarán a alrededor del 36% de la plantilla del CCF, compuesta por unos 3.900 empleados en total.
También se cerrarán ochenta y cuatro sucursales.
El banco espera que muchas salidas sean voluntarias, pero no descarta despidos obligatorios.
Son necesarios cambios para “encontrar nuevamente una senda de crecimiento sostenible”, afirmó el CCF en un comunicado de prensa.
Su objetivo es contener las pérdidas y alcanzar el punto de equilibrio en 2026, con la esperanza de obtener ganancias en 2027.
Adquisición por parte de My Money Group
Hasta enero de este año, CCF existía como HSBC Francia, una rama del banco británico HSBC.
My Money Group no creó la marca desde cero, sino que resucitó un nombre antiguo que fue descartado cuando HSBC compró el banco en 2000.
Como parte de la transferencia de este año, la administración del banco se comprometió a salvaguardar los puestos de trabajo para 2024.
“Tras un periodo de estabilización… el grupo ha precisado su visión estratégica para alcanzar su ambición de convertirse en el banco líder en gestión patrimonial a escala humana en el mercado francés”, declaró la empresa a Euronews en un correo electrónico.
Un portavoz señaló que la reestructuración tiene como objetivo “ofrecer una calidad de servicio única a los clientes del banco acentuando la velocidad, la proximidad y la experiencia de los equipos del CCF”.
Los gerentes de sucursales tendrán mayor libertad para dirigir la actividad comercial y el desempeño financiero de sus sucursales, agregó el portavoz.
Ahora se espera que los sindicatos negocien con los funcionarios del CCF hasta mediados del próximo año.