El ejército estadounidense realizó una prueba de misil balístico intercontinental nuclear (ICBM) el día en que los votantes del país elegían a su próximo presidente, dijo el Comando de Ataque Global de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en un comunicado el miércoles. El lanzamiento fue parte de una práctica “de rutina” y siguió a “meses de preparación”, agregó.
El 5 de noviembre a las 23:01 hora del Pacífico se lanzó un misil balístico intercontinental Minuteman III desarmado desde la base espacial estadounidense Vandenberg, en California, según el comunicado. El misil recorrió unas 4.200 millas (6.759 kilómetros) hasta el sitio de pruebas de misiles balísticos de defensa Ronald Reagan, ubicado en el atolón de Kwajalein, en el territorio del Pacífico de la República de las Islas Marshall.
El lanzamiento de prueba tenía como objetivo demostrar que la disuasión nuclear estadounidense “es segura, confiable y eficaz para disuadir las amenazas del siglo XXI y tranquilizar a nuestros aliados”, afirmó el comando, añadiendo que anteriormente se habían realizado 300 lanzamientos similares. El ejército estadounidense también negó que la medida estuviera vinculada de alguna manera a “los acontecimientos mundiales actuales”.
Un lanzamiento aéreo valida la capacidad de supervivencia de nuestros misiles balísticos intercontinentales, que sirven como respaldo estratégico de la defensa de nuestra nación y de nuestros aliados y socios”, dijo el general Thomas A. Bussiere, comandante del Comando de Ataque Global de la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
Minuteman III es el único misil balístico intercontinental (ICBM) estadounidense basado en silos. Según la Fuerza Aérea estadounidense, tiene un total de 400 misiles de este tipo y tres alas de misiles que los operan: la 90.ª Ala de Misiles en Wyoming, la 91.ª en Dakota del Norte y la 341.ª en Montana.
Estos misiles, que se lanzaron por primera vez en 1970, pueden recorrer una distancia de más de 6.000 millas (9.656 kilómetros) a una velocidad máxima de 24.000 kilómetros por hora, o 23 veces más rápido que la velocidad del sonido.
Según algunos medios de comunicación, Washington había advertido previamente a Moscú sobre el lanzamiento de una prueba de misil.
A finales de octubre, Rusia llevó a cabo su propio ejercicio de disuasión nuclear estratégica, en el que se lanzaron misiles balísticos y de crucero. En aquel momento, el presidente Vladimir Putin declaró que Moscú estaba tratando de mantener sus fuerzas nucleares en el nivel “necesariamente suficiente” , pero que no tenía intención de verse arrastrada a una nueva carrera armamentística. Según el Kremlin, también se informó de ello a los “países pertinentes” .
El ejercicio nuclear ruso se produjo poco después de los ejercicios “Steadfast Noon” de la OTAN, que comenzaron en Europa occidental a mediados de octubre y en los que participaron 13 miembros del bloque militar encabezado por Estados Unidos.
Los miembros europeos de la OTAN se estaban entrenando para desplegar armas proporcionadas por Estados Unidos en virtud del acuerdo de intercambio nuclear de la organización. Moscú ha declarado en repetidas ocasiones que el sistema de intercambio nuclear del bloque es contrario al espíritu de no proliferación nuclear.