La disolución de la AFIP llevará al despido de más de 3.100 empleados, lo que representa el 15 por ciento del personal del organismo.
El Gobierno argentino encabezado por el ultraderechista Javier Milei anunció la disolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), el ente encargado de la recaudación de impuestos.
Por medio de un comunicado, la Oficina del Presidente informó que la decisión se enmarca en su «plan de reducción del Estado y eliminación de estructuras ineficientes», y creará en su reemplazo la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA).
La disolución de la AFIP llevará al despido de más de 3.100 empleados, lo que representa el 15 por ciento del personal del organismo, según indicaron desde la presidencia argentina.
El gremio que representa a los empleados de AFIP, rechazó los anuncios del Gobierno y señalaron que no serán toleradas desvinculaciones en base al origen político, ni por ninguna otra causa.
No dejaremos que se vulneren los derechos de los trabajadores, señaló la Unión de Personal Superior de la entidad (Upsafip) en un comunicado.
El vocero presidencial Manuel Adorni comunicó que la medida busca reducir en un 48 por ciento las autoridades superiores y un 31 por ciento los niveles inferiores de la estructura actual de la AFIP.
En total, el Gobierno estima que se van a eliminar el 34 por ciento de los cargos públicos en la AFIP.
Adorni añadió que lo mismo ocurrirá con los directores de la Dirección General Impositiva (DGI) y la Dirección General de Aduana (DGA).
La creación de ARCA tiene como objetivo la reducción del Estado, la eliminación de cargos innecesarios, la profesionalización del ente, la destrucción de los circuitos corruptos y la mejora en la eficiencia de la recaudación y control aduanero, eliminando los privilegios del pasado y optimizando la gestión pública, aseguró el Gobierno de Milei.