El portavoz del Ejército israelí en árabe, Avichay Adraee, ha instado a los residentes del valle de Bekaa, en el este del Líbano, a evacuar ciertos edificios especificados en un mapa que ha compartido en su cuenta de X. En el aviso, advierte a los residentes de que las zonas marcadas pertenecen a instalaciones “de Hezbolá” y de que el Ejército operará en ellas.
“Una advertencia urgente a los residentes de la región de Bekaa, específicamente a aquellos en los edificios marcados en el mapa y ubicado en el área de Tamnine”, comienza diciendo Adraee, para después continuar: “Se encuentran cerca de instalaciones e intereses de Hezbolá, contra los cuales las FDI operarán en un futuro próximo”.
El portavoz insiste en que por “la seguridad” de la población “deben evacuar los edificios” y los alrededores, “manteniéndose alejado de ellos a una distancia no inferior a 500 metros”.
Los ataques israelíes contra el Líbano han provocado más de 2.300 muertos desde el 8 de octubre de 2023 (1.500 de ellos en las últimas tres semanas), cuando estallaron las hostilidades con Hamás, en Gaza, y Hezbolá, y han obligado a más de 1,2 millones de personas a abandonar sus hogares, según cifras oficiales.
De los desplazados, 400.000 son niños, según especificó este miércoles el subdirector ejecutivo de Unicef, Ted Chaiban, en un comunicado.
“Casi 190.000 de los que fueron forzados a abandonar sus hogares están en refugios improvisados esperando una apariencia de seguridad, principalmente en escuelas públicas, mientras que innumerables buscan refugio con cualquiera que pueda ofrecer un techo y un lugar para descansar. Algunos no tienen otra opción que la playa o la calle”, señaló Chaiban en una sesión informativa de medios de la ONU.
Actualmente, más del 25 % del Líbano se encuentra bajo órdenes de evacuación del Ejército israelí, según denunció el martes la directora para Oriente Medio de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Rema Jamous Imseis.
En otro comunicado, el Ejército ha anunciado este jueves haber desmantelado 150 “objetivos terroristas” en el último día, como almacenes de armas y otra infraestructura, sin apenas dar más detalles, así como haber eliminado a más de 45 milicianos, entre ellos un comandante de Hizbulá en la zona de Bint Jbeil, sur de Líbano.