Serbia busca formalmente ingresar a la UE, pero ha logrado pocos avances en materia de Estado de derecho y reformas democráticas, que son las principales condiciones previas para la membresía en el bloque de 27 naciones.
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha firmado un acuerdo con su homólogo serbio, Aleksandar Vučić, para vender 12 aviones de combate Rafale al país de los Balcanes Occidentales.
El anuncio sobre los aviones de guerra multipropósito se hizo durante una conferencia de prensa conjunta en Belgrado, que Macron visita para fortalecer los lazos de Serbia con la Unión Europea.
Macron calificó el acuerdo de “histórico e importante” y elogió a Serbia por su “demostración de espíritu europeo”.
“La elección de Serbia de los cazas Rafale fue una elección clara que representa una alianza a largo plazo entre nuestros dos países, en el marco de una Europa más fuerte y soberana. Esta elección forma parte de nuestra autonomía estratégica y la fortalece”, afirmó.
Serbia necesita modernizar su flota y Vučić dijo que el acuerdo por el Rafale era una “gran noticia”.
“El contrato incluye el paquete logístico completo, incluidos los motores de repuesto y otros elementos. El valor del contrato es de 2.700 millones de euros. Doce aviones completamente nuevos serán propiedad de la República de Serbia”, explicó.
Rusia ha sido el proveedor tradicional de aviones militares, incluidos helicópteros de combate, a Serbia, que se ha negado a sumarse a las sanciones internacionales contra Moscú por su invasión de Ucrania.
Las negociaciones para la adhesión a la UE se estancan
Serbia busca formalmente ingresar a la Unión Europea, pero ha logrado pocos avances en materia de Estado de derecho y reformas democráticas, que son las principales condiciones previas para la membresía en el bloque de 27 naciones.
En una carta al público serbio publicada en los medios locales el jueves, Macron buscó alentar a la nación balcánica a perseguir su futuro en la UE, pero señaló que “la perspectiva de unirse a la Unión Europea no parece ser tan atractiva como debería”.
Citó “inquietudes y cansancio por el ritmo de las negociaciones de adhesión, pero también a veces una especie de resentimiento, incluso desconfianza” hacia la UE.
“Vengo de nuevo hoy a Serbia con un mensaje simple: la Unión Europea y sus naciones necesitan tener una Serbia fuerte y democrática en sus filas y Serbia necesita una Unión Europea fuerte y soberana para defender y promover sus intereses con respeto a su identidad”, dijo Macron en la carta, publicada en los periódicos Danas y Politika.
Macron también advirtió que después de que Rusia atacó a Ucrania, el “juego de equilibrio” de Serbia entre las potencias mundiales es una “ilusión”.
Dijo que Serbia sólo podrá proteger sus intereses y preservar su identidad como parte de la UE.
Las compras más recientes del ejército serbio, que también incluyen misiles antiaéreos de fabricación china, han preocupado a algunos de sus vecinos tras la sangrienta desintegración de la ex Yugoslavia en los años 1990.
Serbia está casi completamente rodeada por países miembros de la OTAN, incluido otro operador de Rafale, Croacia.