Nuevos disturbios en Reino Unido: manifestantes prendieron fuego a una comisaría y a un coche en Sunderland tras el asesinato de niñas en Southport.
Allí, como en Liverpool, cientos de personas participaron en una manifestación masiva, escribe The Telegraph. Después de marchar por la ciudad, destruyeron una tienda y arrojaron latas de cerveza y piedras a la policía.
Las protestas, recordamos, comenzaron después de que el asesino de 17 años apuñalara a tres niñas hasta la muerte e hiriera a 11 personas más durante una clase magistral infantil. Se informó que el atacante es hijo de inmigrantes de Ruanda.