El primer ministro polaco, Donald Tusk, ha lanzado un mensaje tranquilizador a su homóloga italiana, Giorgia Meloni, a la que ha recordado que “no hay Europa sin Italia” ni decisión sin ella, en referencia al reparto de cargos de la cúpula europea que discutirán los líderes este jueves y viernes pese a que la lista de nombres ya llega acordada por la coalición de ‘populares’, socialistas y liberales.
La propuesta de reparto, en la que Tusk ha ejercido como negociador ‘popular’, supondrá la renovación de la alemana conservadora Ursula von der Leyen al frente de la Comisión Europea, la designación del socialista portugués António Costa y la elección de la primera ministra estonia, Kaja Kallas, como relevo para Josep Borrell al frente de la diplomacia europea.
Un reparto de altos cargos que los tres grupos políticos negociaron sin contar con los gobiernos de Italia, Hungría y República Checa, lo que ha provocado críticas por parte de Meloni y del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, que han amenazado con oponerse a los nombramientos, aunque desde el resto de capitales insisten en que basta con una mayoría cualificada para sacar adelante el acuerdo.
Tusk, no obstante, se ha mostrado en declaraciones a los medios a su llegada a la reunión en Bruselas, más partidario de contar con Giorgia Meloni a bordo, por lo que ha lanzado un mensaje conciliador al asegurar que el malestar generado en Roma por el acuerdo a tres bandas se debe a un “malentendido”.
“Quiero dejar clara una cosa: nadie respeta a Meloni y a Italia más que yo. Creo que ha habido un malentendido, porque a veces necesitamos plataformas políticas específicas para facilitar el proceso, pero la decisión final corresponde a Meloni y al resto de líderes durante la cumbre”, ha incidido el líder polaco.
“La única razón ha sido facilitar el proceso, en serio”, ha reiterado, para remachar que “no hay Europa sin Italia ni decisión sin Meloni”.