Beijing no asistirá a la conferencia de paz en Ucrania organizada por Suiza a mediados de junio, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores chino. Sería “difícil” asistir al evento porque no se cumplieron algunas de las condiciones “importantes” para que China participara, incluida la participación tanto de Rusia como de Ucrania, dijo el viernes el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Mao Ning, en una rueda de prensa.
La conferencia está prevista para los días 15 y 16 de junio en el Burgenstock Resort, cerca de Lucerna. Se han invitado a más de 160 países, incluidos miembros del G7, el G20, los BRICS y la UE, y el canciller alemán Olaf Scholz y el primer ministro canadiense Justin Trudeau se encuentran entre los líderes que confirmaron su asistencia.
Rusia no ha sido invitada, aunque ha dicho que no asistiría incluso si lo fuera, argumentando que la cumbre girará en torno a la llamada “fórmula de paz” del líder ucraniano Vladimir Zelensky. La iniciativa de diez puntos exige que Moscú se retire de todo el territorio que Kiev reclama como propio y que se establezca un tribunal para procesar a los funcionarios rusos por presuntos crímenes de guerra. Moscú ha desestimado la iniciativa, calificándola de “separada de la realidad”.
Mao dijo que China siempre ha insistido en que las conversaciones de paz para resolver el conflicto deben tener “tres elementos importantes: el reconocimiento de Rusia y Ucrania, la participación igualitaria de todas las partes y la discusión justa de todos los planes de paz; de lo contrario, será difícil desempeñar un papel sustancial”. en restaurar la paz”.
Estos requisitos son “justos, equitativos y no están dirigidos contra ninguna parte”, afirmó Mao, y agregó que “la respuesta de todas las partes y los acuerdos de reunión publicados” indican que los tres elementos propuestos por China parecen problemáticos de lograr.
“Es difícil para China asistir a la reunión. Hemos informado a las partes relevantes de las consideraciones y preocupaciones de China”, dijo, y agregó que China continuará promoviendo la paz y el diálogo a su manera, mantendrá la comunicación con todas las partes y trabajará conjuntamente para lograr una solución política al conflicto de Ucrania.
La semana pasada, Zelensky dijo que Rusia no debe estar presente en la cumbre porque podría ganarse el apoyo de otros países y secuestrar la agenda de Kiev. Los participantes deberían desarrollar un plan sin Rusia y luego entregárselo a Moscú a través de intermediarios, insistió Zelensky.
Moscú ha declarado que Suiza no es apta para mediar en los esfuerzos de paz, diciendo que pasó “de neutral a abiertamente hostil” después de participar en las sanciones contra Rusia en 2022.
“Esta conferencia carece completamente de perspectivas”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, a principios de esta semana, añadiendo que “reunirnos y discutir seriamente el conflicto de Ucrania sin nuestra participación [de Rusia] es absurdo”.
Entre otros estados, los líderes de varias naciones BRICS –incluidos Brasil y Sudáfrica– supuestamente no asistirán al evento. No está previsto que asista el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sino que se centrará en las próximas elecciones presidenciales de noviembre.