El gremio ferroviario argentino La Fraternidad inició este jueves una medida de fuerza que aplican durante 24 horas en los trenes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), en reclamo de óptimas condiciones de trabajo y de una recomposición salarial que mejore su poder adquisitivo deteriorado por la inflación
El colectivo sindical redujo la velocidad de las formaciones en todas las líneas de pasajeros y de carga. Estas se desplazan a 30 km/h y ocasionaron demoras de entre 30-50 minutos en los servicios de traslado de personas en el AMBA, cancelaciones de viajes y congestión de pasajeros en las estaciones y en las paradas de buses o colectivos.
El secretario sindical del gremio, Omar Maturano, manifestó que la medida de fuerza se aplica ante la imposibilidad de alcanzar “un acuerdo salarial que permita compensar las pérdidas de poder adquisitivo y la falta de inversión en material rodante e infraestructura ferroviaria”. Adelantó que irán a paro total el próximo 4 de junio si no son escuchados.
Los sindicalistas reclamaron un incremento en sus haberes para hacer frente al ascenso en los precios y la elevada inflación. Aunque el índice inflacionario ronda el 287 por ciento, durante la negociación paritaria la patronal les ofreció solo una recomposición salarial de 208 por ciento, lo cual rechazaron.
La Fraternidad ha sido enfática en que el Gobierno y los empresarios no reconocen la pérdida de poder adquisitivo y tampoco la inflación registrada durante marzo, abril y mayo.
Además, ha lamentado que no hallan a ningún funcionario con capacidad para dialogar. “No hay nadie para hablar con fuerza propia como lo era antes”, dijo Maturano a medios locales.
Por otra parte, exigieron mejores condiciones laborales e inversión pública. Denunciaron que hubo un recorte del 59 por ciento del presupuesto y debido a ello hacen frente a numerosas dificultades para adquirir insumos que permitan mantener en funcionamiento las líneas de trenes en AMBA.
En declaraciones a la prensa, Maturano aseveró que “no hay una inversión ni una política para el modo ferroviario”. Alertó que trabajan “sin insumos, atando algunas veces con alambre algunos objetos y así salimos con los trenes. Y yo le pondría un sinónimo, que estamos trabajando con bajas condiciones de seguridad”.
El 27 de mayo, La Fraternidad fue convocada por el ministro de Trabajo, Julio Cordero, para realizar una audiencia de trabajo con la parte empresaria.
Además de rechazar la oferta salarial puesta sobre la mesa, el gremio denunció que Cordero y los empresarios quisieron sostener la reunión sin la presencia de los restantes sindicatos del sector, cuyos líderes se hallaban esperando en otra sala.