El ministro de Exteriores de Reino Unido, David Cameron, se ha manifestado este domingo radicalmente en contra de un posible embargo de armas contra Israel para facilitar un alto el fuego en Gaza y asegurado que “el problema” de las conversaciones para terminar con las hostilidades reside en el movimiento islamista palestino Hamás.
“Se les ha ofrecido un acuerdo que permitiría la liberación de cientos de prisioneros que están en cárceles israelíes y no lo han aceptado”, ha lamentado Cameron en declaraciones a Sky News. “Si aceptaran el pacto la guerra podría terminar mañana”, ha añadido.
Hamás exige como condición indispensable un alto el fuego para comenzar a negociar, mientras que Cameron ha propuesto primero cerrar un acuerdo para liberar a los rehenes israelíes en manos de las milicias palestinas antes de “terminar con las hostilidades y, desde ahí, negociar una paz sostenible”.
Sobre su negativa al embargo de armas, Cameron recordó que Reino Unido solo proporciona a Israel un 1 por ciento de su material armamentístico y, aunque “sería sencillo cancelar esas licencias si vemos que Israel está violando los derechos humanos con estas armas”, las restricciones “solo acabarían fortaleciendo a Hamás”.
“La verdad es que no me parece un derrotero muy sabio. Si debilitas a Israel complicas el acuerdo para liberar a los rehenes”, ha indicado.