La Unión Europea (UE) ha condenado este domingo “en los términos más firmes” el “espantoso ataque” perpetrado de madrugada en la localidad de Banjska, en el norte de Kosovo, que se ha saldado con un policía muerto y otro herido y que Pristina ha achacado a “bandas criminales” relacionadas con Serbia.
El Alto Representante de la UE para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, ha subrayado en un comunicado que “deben esclarecerse todos los hechos relacionados con el ataque” y ha agregado que “los responsables deben responder ante la justicia”.
“Más vidas inocentes corren peligro a causa de las hostilidades en curso en los alrededores del monasterio de Banjska. Estos ataques deben cesar inmediatamente”, ha subrayado, antes de resaltar que la misión policial y judicial de la UE en Kosovo (EULEX) “está sobre el terreno y en estrecho contacto con las autoridades y la misión de la OTAN en Kosovo (KFOR)”.
“La UE y sus estados miembro instan reiteradamente a todos los actores a que trabajen para desescalar la situación en el norte de Kosovo”, ha zanjado Borrell.
Horas antes, el primer ministro kosovar, Albin Kurti, había descrito lo sucedido como “un ataque criminal y terrorista”, al tiempo que subrayó que “el crimen organizado con apoyo político, financiero y logístico desde Belgrado está atacando el país”. “Los responsables fracasarán y serán capturados, juzgados y castigados”, dijo.
Por su parte, la presidenta de Kosovo, Vjosa Osmani, destacó que el incidente ha sido “planeado, orquestado y ejecutado por bandas criminales serbias” y abundó en que “es un ataque contra la ley y el orden en el norte del país y un ataque contra Kosovo”.
Osmani sostuvo que “los ataques organizados contra las agencias de seguridad de Kosovo son ataques contra la soberanía de Kosovo” y expresó su deseo de que “los aliados apoyen a Kosovo en sus esfuerzos por imponer la ley y el orden y preservar la soberanía en todas las áreas de Kosovo”.