Los comentarios del Ministerio de Asuntos Exteriores de China se produjeron tras las acusaciones de Washington de que Beijing está desarrollando armas antisatélites.
Estados Unidos representa la mayor amenaza a la seguridad en el espacio y es el principal instigador detrás de la militarización del ámbito, afirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
El comentario se produjo después de que un alto funcionario del Pentágono reiterara las acusaciones de que Beijing está desarrollando armas antisatélites, acusación negada por el gobierno chino.
Washington ha hecho acusaciones similares contra Rusia en múltiples ocasiones, sugiriendo que Moscú tiene capacidades antisatélites no reveladas, que según afirma son posiblemente de naturaleza nuclear.
A finales de febrero, el presidente ruso Vladimir Putin desestimó las insinuaciones calificándolas de “infundadas”. Moscú ha afirmado además que las acusaciones son simplemente una cortina de humo destinada a distraer la atención de las propias actividades militares de Washington en el espacio.
En abril, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zakharova, acusó a Estados Unidos de negarse a considerar las iniciativas rusas y chinas destinadas a impedir una carrera armamentista en el espacio.
Más tarde ese mes, Rusia vetó un proyecto de resolución entre Estados Unidos y Japón en el Consejo de Seguridad de la ONU porque el documento no incluía algunas enmiendas clave propuestas por Beijing y Moscú. Este último argumentó que el proyecto de resolución no había sido lo suficientemente amplio.
En declaraciones a RIA Novosti el jueves, un representante del Ministerio de Asuntos Exteriores chino afirmó que Estados Unidos es “la fuerza impulsora más poderosa detrás de la militarización del espacio y su conversión en teatro de guerra, así como la mayor amenaza a la seguridad espacial”.
Según diplomáticos chinos, Estados Unidos está difundiendo “declaraciones mendaces” para justificar la expansión de su propio programa militar espacial. El ministerio dijo que Beijing estaba listo para firmar un acuerdo de control de armas espaciales.
La semana pasada, el general Stephen Whiting, jefe del Comando Espacial de Estados Unidos, advirtió que “la República Popular China se está moviendo a una velocidad impresionante en el espacio y está desarrollando rápidamente una gama de armas antiespaciales para poner en riesgo nuestras capacidades espaciales”.
El mes pasado, afirmó que China había construido una “red letal sobre el Océano Pacífico para encontrar, reparar, rastrear y, sí, apuntar a las capacidades militares estadounidenses y aliadas”, y que Beijing supuestamente triplicó el número de sus satélites de inteligencia, vigilancia y reconocimiento en órbita desde 2018.
En febrero, el portavoz del Ministerio de Defensa chino, Zhang Xiaogang, respondió a las acusaciones de Washington diciendo que los propios Estados Unidos “definen el espacio como un ‘territorio de combate’, desarrollan y despliegan armas espaciales ofensivas… e incluso rastrean maliciosamente y se acercan peligrosamente a las naves espaciales de otros países”.