El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, viajó hoy a Baltimore, donde sobrevoló en helicóptero el área donde colapsó el 26 de marzo el puente Francis Scott Key tras ser impactado por un carguero.
Antes de reunirse con funcionarios locales, Biden examinó la devastación que dejó el derrumbe de la estructura de hierro, lo que interrumpió el tráfico y el comercio el estado de Maryland, donde está el puerto de Baltimore, uno de los más importantes de la costa este de Estados Unidos.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo la víspera que el mandatario quería “una mirada sobre el terreno”.
El impacto del portacontenedores Dali contra uno de los soportes principales del puente provocó la muerte de seis trabajadores latinos que estaban en labores de reparación allí y cayeron a las aguas del río Patapsco.
Según el programa, el presidente Biden se reunirá con los familiares de las víctimas.
La limpieza de la zona continúa. Esta semana abrieron un primer canal de emergencia y un segundo de acceso comercial al puerto de Baltimore, pero todavía no hay cifras definitivas sobre cuánto costará devolver todo a la normalidad.
Biden dijo poco después de la tragedia que el gobierno federal asumiría el costo, pero eso pasa por el tamiz del Capitolio.
La directora de la Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca, Shalanda Young, escribió este viernes al Congreso para pedir a los legisladores que autoricen «una participación del 100 por ciento en los costos federales para la reconstrucción del puente».