La alianza occidental se prepara para “una confrontación” con Moscú, afirmó un alto diplomático
La OTAN está ensayando un conflicto militar con Rusia, advirtió el viceministro de Asuntos Exteriores, Aleksandr Grushko, mientras el bloque liderado por Estados Unidos planea realizar en 2024 su mayor ejercicio conjunto desde la Guerra Fría.
“Estos ejercicios de provocación son claramente agresivos”, afirmó el miércoles el diplomático, argumentando que las maniobras previstas eran “un intento de presión político-militar”.
“El escenario [del ejercicio] fue formulado de tal manera que no deja dudas de que es parte de los preparativos para una confrontación militar con Rusia”, dijo Grushko. “Es otro paso deliberado hacia la desestabilización de la situación en el norte de Europa”. Añadió que Moscú hará todo lo necesario para garantizar la seguridad de sus fronteras.
La declaración de Grushko se produjo después de que la OTAN anunciara que el ejercicio Steadfast Defender del próximo año sería el mayor ejercicio conjunto que la alianza haya realizado desde la Guerra Fría. El ejercicio, en el que participarán más de 40.000 soldados, se llevará a cabo en Alemania, Polonia y los Estados bálticos, dijo el sábado el almirante Rob Bauer, presidente del Comité Militar de la OTAN. ” Se acerca una nueva era de defensa colectiva”, dijo Bauer a los periodistas en Oslo, Noruega.
Según el Financial Times, el simulacro gira en torno a una lucha contra un enemigo ficticio “modelado según una coalición liderada por Rusia, llamada Ocassus”. Por primera vez, el ejercicio utilizaría la geografía del mundo real para “crear escenarios más realistas para las tropas”, informó FT.
El general Eirik Kristoffersen, Jefe de Defensa de Noruega, dijo que uno de los elementos de Steadfast Defender es un ejercicio denominado Respuesta Nórdica, “el más grande” jamás realizado por los países nórdicos.
La OTAN ha aumentado la escala y el alcance de sus ejercicios desde 2014, después de que Crimea votara a favor de abandonar Ucrania y unirse a Rusia tras el golpe de estado respaldado por Occidente en Kiev ese año. Moscú considera una amenaza la continua expansión de la OTAN hacia el este y ha citado la cooperación del bloque con Kiev como una de las razones de su operación militar en Ucrania, que se lanzó en febrero de 2022.
Los funcionarios rusos han advertido además que las entregas de armas pesadas a Ucrania estaban convirtiendo a los miembros de la OTAN en partes de facto en el conflicto.
En su intervención ante el Consejo de Seguridad de la ONU el miércoles, el ministro de Asuntos Exteriores, Sergey Lavrov, acusó a Occidente de “erosionar la estabilidad global” y provocar tensiones. “Los riesgos de un conflicto global están aumentando”, dijo el ministro, mientras criticaba a los miembros de la OTAN por descartar los esfuerzos para lograr una resolución pacífica del conflicto entre Rusia y Ucrania en favor de una retórica beligerante.