La Unión Europea ha señalado este miércoles que toma nota del alto el fuego propuesto por el contingente de paz ruso desplegado en la región de Nagorno Karabaj y espera su aplicación en el terreno, instando a Azerbaiyán a retomar con garantías el diálogo con la población armenia de la región separatista.
Después de que los últimos combates en Nagorno Karabaj se hayan saldado con al menos 32 muertos en el marco de la operación militar de Azerbaiyán, en declaraciones en rueda de prensa desde Bruselas, el portavoz del Servicio de Acción Exterior de la UE, Peter Stano, ha subrayado que la UE está lidiando con la situación “muy intensamente” con contactos en Nueva York en los márgenes de la Asamblea General de Naciones Unidas.
“Tomamos nota del anuncio del acuerdo para el alto el fuego y esperamos que esto se siga en el terreno, esperamos un inmediato cese de las hostilidades y que Azerbaiyán pare las operaciones militares”, ha recalcado Stano, apuntando que Bakú no puede usar esta escalada como pretexto para provocar un “éxodo” de la población armenia que viven en el enclave en disputa.
En todo caso, el portavoz ha evitado especular sobre eventuales sanciones contra Azerbaiyán y se ha limitado a decir que los Estados miembros decidirán “nuevos pasos” según evolucione la situación en el terreno.
Preguntada directamente por la posición de la presidenta, Ursula von der Leyen, que se ha referido recientemente a Bakú como un socio energético fiable, su portavoz Dana Spinant ha reiterado el comunicado del Servicio de Acción Exterior de la UE que denuncia la escalada militar azerí.