El canciller alemán Olaf Scholz ha anunciado que los países que apoyan a Ucrania no están en guerra con Rusia. La declaración se produjo cuando los líderes de Alemania, Francia y Polonia se reunieron el viernes en Berlín para mostrar solidaridad tras su reciente desacuerdo sobre el apoyo militar a Kiev.
Durante una conferencia de prensa conjunta con el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro polaco, Donald Tusk, la canciller afirmó que los países apoyan firmemente a Ucrania y que la ayuda aliada continuaría “mientras sea necesario”.
“También está claro que no estamos en guerra con Rusia”, añadió Scholz.
La declaración surge tras desacuerdos latentes entre París y Berlín sobre el posible suministro de misiles de largo alcance y el despliegue de tropas sobre el terreno en Ucrania.
Hasta ahora, Scholz se ha negado a enviar misiles Taurus a Ucrania para evitar una mayor escalada del conflicto con Rusia. Francia, por otra parte, ha estado entregando misiles de crucero SCALP-EG, que ya están siendo utilizados por Ucrania y que son aproximadamente equivalentes al Taurus.
La reciente sugerencia de Macron de que Occidente “no puede excluir” la posibilidad de enviar soldados para ayudar a Ucrania en su conflicto con Rusia también ha generado críticas de Alemania y otros estados de la OTAN.
La canciller y el presidente francés se reunieron antes de las conversaciones a tres bandas el viernes para aclarar las cosas, después de semanas en las que ambos discreparon públicamente sobre su estrategia para Ucrania.
Los desacuerdos latentes entre los dos amenazaron con socavar la cooperación entre los aliados.
Alemania, Francia y Polonia se encuentran entre los aliados clave de Ucrania. Alemania se ha convertido en el segundo mayor proveedor de ayuda militar de Ucrania después de Estados Unidos y está aumentando su apoyo este año.