El Sur global ya no es la mayoría silenciosa, se ha convertido en una fuerza clave para el cambio del orden internacional, afirmó hoy a Prensa Latina el canciller chino, Wang Yi.
Ante la pregunta sobre el impacto de la Cumbre del Grupo de los 77 y China, realizada en Cuba, y la reciente expansión del mecanismo Brics, Wang Yi subrayó que ambos eventos son un ejemplo de que la unidad y la autosuficiencia constituyen el éxito.
«Como conglomerado de países con mercados emergentes y naciones en desarrollo, la proporción del Sur global en la economía mundial ha aumentado a más del 40 por ciento y está reescribiendo profundamente el mapa global», enfatizó.
En su opinión, la expansión del Brics es la encarnación del ascenso grupal y la aceleración del proceso de multipolarización a nivel global.
Señaló que China es un miembro firme del Sur global: «Siempre compartimos el mismo destino con todos los países del Sur y hemos sido la columna vertebral para promover el desarrollo y la revitalización» de los mismos.
Este año será un nuevo punto de partida para la colaboración con Asia, África y América Latina, agregó.
Comentó que el foro de cooperación del gigante asiático y los países árabes celebrará su vigésimo aniversario.
Por otro lado, el Foro China-Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) llegará a 10 años y Beijing acogerá la nueva cumbre del Foro de Cooperación China-África este otoño.
Del mismo modo, Wang Yi expresó el respaldo a la presidencia de Rusia del grupo Brics, así como la organización de cumbres del G20 de Brasil y Perú.
Durante el diálogo con algunos medios de prensa a propósito de la segunda sesión de la XIV Asamblea Popular Nacional, el canciller ratificó la disposición de China de promover un nuevo tipo de relaciones internacionales, que se oponga al autoritarismo y unilateralismo.
Wang Yi se opuso a la creación de bloques y las alianzas en detrimento de otras naciones, al tiempo que subrayó la necesidad de que todos tengan igualdad de derechos.
De hecho, el impulso de una nueva gobernanza global y la defensa de una mayor representatividad de los mercados emergentes y países en desarrollo, son tareas de la diplomacia china para 2024.