El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, aseguró que la paz vencerá al fascismo y al imperialismo y destacó la importancia de continuar la lucha hoy día a favor de los pueblos.
Durante un encuentro la víspera con el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolai Patrushev, quien con anterioridad se reunió en esta capital con delegaciones de países soberanos como Cuba, Venezuela, Bolivia y el país sede, Ortega resaltó los principios de justicia y solidaridad.
El líder sandinista aclaró que a Nicaragua no se vino a abordar ningún plan para invadir a Estados Unidos, o para irse en contra de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) o de Israel.
“¡No! Aquí hemos venido a trabajar un plan para defender a nuestros pueblos y que tengan la oportunidad de combatir la pobreza, y lograr un mejor desarrollo en el orden económico-social”, manifestó.
Afirmó que con el desarrollo de dicha reunión, a la que calificó de histórica, se sienten fortalecidos.
En la cita con Patrushev, a la que también asistieron la vicemandataria Rosario Murillo y otras altas autoridades del Ejecutivo, el gobernante señaló que esos diálogos fueron para el desarrollo y la seguridad de los pueblos.
Ortega se refirió a la guerra en Ucrania y cómo ese país se unió a la OTAN, a Estados Unidos y otras naciones europeas para defender al nazismo, mientras los soldados rusos están librando la batalla contra ese mal.
Por otro lado, denunció los crímenes cometidos por las fuerzas de ocupación israelíes contra la población palestina en la Franja de Gaza y calificó esos hechos como una realidad sangrienta, dolorosa y brutal.
“La sangre derramada en Palestina y la sangre derramada en Ucrania es sangre que corre a causa de la actitud fascista, nazi, de los gobiernos que están agrupados en la OTAN”, enfatizó.
En ese sentido, acentuó que los pueblos están frente a lo que es un intento del capitalismo mundial, del imperialismo, de reimplantar el nazi-fascismo, no sólo en Europa o en Ucrania, sino también en los países latinoamericanos y caribeños.
Según el mandatario, las Naciones Unidas no tienen mecanismos para resolver tales problemáticas mundiales, pues en el seno de ese organismo multilateral se agotan las palabras y son burladas las votaciones.