El exceso de rentabilidad se encuentra entre los factores clave que contribuyen al aumento de los precios al consumo a nivel mundial, según un estudio.
Las grandes empresas alimentaron la inflación en 2022 al trasladar aumentos de costos mayores de los necesarios para proteger sus márgenes, según un nuevo informe de los think tanks IPPR y Common Wealth.
Publicado a principios de esta semana, el estudio conjunto encontró que las ganancias empresariales nominales eran en promedio un 30% más altas a fines de 2022 que a fines de 2019.
Las grandes empresas hicieron que la inflación “llegara a un máximo y se mantuviera más persistente”, particularmente en los sectores de petróleo y gas, producción de alimentos y materias primas, dijeron los investigadores.
“Sostenemos que el poder de mercado de algunas corporaciones y en algunos sectores –incluido el poder de mercado temporal que surgió después de la pandemia– amplificó la inflación”.
El informe señala que esto no significa necesariamente que los márgenes generales de beneficio hayan aumentado, pero sí que los precios más altos han sido asumidos por los consumidores.
“Las empresas con poder de mercado (temporal) parecían ser capaces de proteger sus márgenes o incluso obtener ‘beneficios excedentes’, fijando precios más altos de lo que sería social y económicamente beneficioso”, escribieron los investigadores.
Las ganancias excesivas fueron aún mayores en Estados Unidos, donde muchos sectores importantes de la economía están dominados por varias corporaciones poderosas, indicó el informe.
“Debido a que los precios de la energía y los alimentos influyen tan significativamente en los costos de todos los sectores de la economía en general, esto exacerbó el shock de precios inicial, contribuyendo a que la inflación alcanzara un máximo más alto y durara más tiempo que si hubiera habido menos poder de mercado”, concluye el informe.
Los investigadores analizaron informes financieros de 1.350 empresas que cotizan en el Reino Unido, Estados Unidos, Alemania, Brasil y Sudáfrica. Identificaron a Shell, ExxonMobil, Glencore y Kraft Heinz entre las empresas que más aumentaron sus ganancias con respecto al promedio anterior a la pandemia.