El rey Carlos III dijo a los líderes mundiales el viernes que las conversaciones COP28 de la ONU en Dubai deben ser un punto de inflexión en la lucha contra el cambio climático , cuando comenzaron duras negociaciones sobre los combustibles fósiles.
El rey Carlos inició dos días de discursos de jefes de Estado y de gobierno en los Emiratos Árabes Unidos, ricos en petróleo, con una severa advertencia.
“Estamos llevando a cabo un vasto y aterrador experimento… todo al mismo tiempo, a un ritmo que supera con creces la capacidad de la naturaleza para afrontarlo”, afirmó.
“Rezo con todo mi corazón para que la COP28 sea otro punto de inflexión crítico hacia una acción transformadora genuina”, añadió el rey, un ambientalista de toda la vida.
La sensación de urgencia se vio acentuada por una advertencia de la ONU el jueves de que 2023 está en camino de convertirse en el año más caluroso registrado, lo que genera temores de que el mundo no cumplirá el objetivo de limitar el calentamiento a 1,5 grados Celsius.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, insistió en este punto diciendo: “El planeta está harto de acuerdos climáticos incumplidos”.
Más de 170 líderes mundiales asistirán a la COP28, pero el presidente chino Xi Jinping y el presidente estadounidense Joe Biden, cuyos países son los mayores contaminadores del mundo, están ausentes.
Uno por uno, los líderes reconocieron la amenaza que plantea el cambio climático, pero la mayoría repitió las promesas existentes.
Las naciones en desarrollo hablaron del impacto desproporcionado del calentamiento global en sus pueblos e instaron a las naciones más ricas a cumplir promesas incumplidas de entregar financiamiento climático.
“A pesar de que India alberga al 17 por ciento de la población mundial, nuestra parte de las emisiones globales de carbono es incluso menos del cuatro por ciento”, dijo el primer ministro indio, Narendra Modi.
El viceprimer ministro chino Ding Xuexiang dijo que las naciones desarrolladas “deberían aumentar sustancialmente su apoyo a los países en desarrollo en finanzas, tecnología y creación de capacidades”.
La conferencia COP28 comenzó el jueves con una temprana victoria: el lanzamiento de un fondo de “pérdidas y daños” para los países vulnerables devastados por desastres naturales.
Los observadores elogiaron otro avance el viernes cuando más de 130 países acordaron priorizar la alimentación y la agricultura (un gran contribuyente a las emisiones) en sus planes climáticos.
Más de 110 países también se han sumado al llamado para triplicar la energía renovable y duplicar la eficiencia energética para 2030, dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
La guerra entre Israel y Hamas también ensombreció la conferencia, y la delegación iraní se retiró en protesta por la presencia de representantes israelíes.